Diego Castro«Cumpliré mi contrato con el Sporting»

«lo único que hice fue defender mis intereses y los de mi familia», si bien entiende que «el club tiene una política que respeto, lo mismo que quiero que entiendan que defiendo lo mío».

El futbolista rojiblanco hizo hincapié en que «si un club pretende mis servicios, lo primero que debe hacer es ponerse en contacto con el Sporting y, si la operación es ventajosa para todas las partes, tomar una decisión, pero eso pasa conmigo y con cualquier jugador de la plantilla».

Diego Castro, en cualquier caso, no descarta renovar su compromiso, aunque ahora no haya aceptado las condiciones ofrecidas por el Sporting para las tres próximas temporadas, con un montante de algo más de 2,5 millones de euros, además de otros incentivos en función de goles y partidos jugados.

«En el fútbol no descarto nada porque puede que en un tiempo avancemos en las negociaciones y haya cambios en las posturas, que ahora están en punto muerto», dijo Diego Castro, que asume que «el Sporting tiene una política, pero en mi caso hay un cariño al club de los cuatro años que llevo aquí», y para el que «es un privilegio formar parte de esta plantilla y disfrutar otro año de este entrenador, con unas sensaciones de cuatro años que se llevan dentro».

El interior pontevedrés puntualizó que «lo único que hice fue no aceptar una propuesta porque, desde mi punto de vista, no llega, pero no falto el respeto». Señaló que «no sé lo que pasará en un futuro porque vivo el presente». Y, asimismo, reiteró que «no es una realidad que quiera forzar mi salida de Gijón», aunque afirmó sentirse «alucinado cuando leo algunas cosas en los periódicos porque da la sensación de que esto es la herencia Thyssen».

El futbolista rojiblanco manifestó que «el primer agradecido soy yo porque desde que llegué a Gijón me cambió la vida y crecí mucho en cuatro años» y recordó, y en varias ocasiones, que anteriormente «me quedé en Gijón y no fue por temas económicos».

«Más motivado»

Diego Castro ha pasado un verano que «no fue grato porque se dijeron muchas cosas que no son reales», aunque esta situación le hace sentirse «más motivado incluso que los jugadores que llegan ahora nuevos», aunque valora como algo «normal que un club pueda interesarse por un futbolista ya que son cosas del mercado y del fútbol, por lo que no tiene que causar alguna situación extraña».

Más de 20 minutos duró la rueda de prensa en la que Diego Castro aprovechó para mostrar su malestar y aclarar todo lo que se dijo sobre su situación, aunque algunas conversaciones sobre su futuro fueron asumidas por el entrenador Fernando Castro, padre del futbolista, y el intermediario Cándido Cardoso, quienes mantuvieran contactos con el Getafe y el Villarreal, entre otros, aunque sólo trascendieron las negociaciones con el club madrileño, que también tuvo trato con el Sporting sobre este tema.

De hecho, el Getafe llegó a ofrecer 800.000 euros, más otros 400.000 euros que se iban a deducir de la ficha del jugador, pagaderos en varios plazos, lo que la entidad gijonesa rechazó ya que la marcha de Diego Castro ahora está tasada en 1,5 millones de euros al contado. Todos estos aspectos son ajenos al futbolista, quien reiteró que «no es real que hay querido forzar mi marcha y eso en el club se sabe».

Diego Castro reiteró que no volverá a hacer declaraciones sobre este asunto y se dedicará «a jugar al fútbol, que es lo mío». El interior gallego seguirá ligado al Sporting una temporada, que es la que tiene de contrato. Luego, ya se verá.

Diego Castro rompió ayer su silencio con una rueda de prensa en Mareo. Y lo hizo para matizar aspectos de su situación, despejar las dudas sobre su futuro y confirmar que cumplirá el año de contrato que le queda en el Sporting.

El jugador gallego, que indicó que «tengo que utilizar a la prensa para comunicarme con la afición, para la que sólo tengo palabras de agradecimiento», manifestó que «se están diciendo cosas que no son ciertas», aunque advirtió que «no quiero dramatizar porque esto no es Ambiciones y no me gusta frivolizar, aunque algunos lo hicieron conmigo». No obstante matizó que «no puedo controlar lo que diga cada uno», en alusión, principalmente, al presidente del Getafe, quien lo acusó de haberse ofrecido y pedir que hiciera un esfuerzo por sacarlo del Sporting.

Diego Castro puntualizó que «la única realidad es que tengo contrato con el Sporting hasta 2011 y mi intención es cumplirlo»; señaló que «soy feliz en Gijón y ni quiero irme ni forzar una situación para marcharme», y, respecto a los contactos con el Getafe, reiteró que «lo que mi padre haga o deje de hacer no tiene nada que ver con lo que digo y no puedo controlar lo que diga un representante, un presidente o un periodista, porque lo mío es jugar al fútbol, pero allá cada uno con su conciencia».

Durante su intervención, convocada a primera hora de la mañana, el jugador gallego insistió en que «respondo de lo que digo yo», aunque lamentó que en algún sector de la afición «pueda dudarse de mí». En este aspecto, recordó que «di todo por este club cuando tenía una cláusula para quedar libre en caso de descenso». «De mi boca sólo salió que en Gijón soy feliz», se le escuchó decir al rojiblanco, que «de momento, voy a estar aquí un año y luego ya se verá».

El interior pontevedrés aseguró que «cumpliré mi contrato con el Sporting» y dijo no contemplar la posibilidad de ser traspasado en el mercado de invierno porque «me gusta acabar lo que empiezo». Sobre la posible ampliación de su compromiso, indicó que «lo único que hice fue defender mis intereses y los de mi familia», si bien entiende que «el club tiene una política que respeto, lo mismo que quiero que entiendan que defiendo lo mío».

El futbolista rojiblanco indicó que «si un club pretende mis servicios, lo primero que debe hacer es ponerse en contacto con el Sporting y, si la operación es ventajosa para todas las partes, tomar una decisión, pero eso pasa conmigo y con cualquier jugador de la plantilla».