por Sporting
«Me siento como un cero a la izquierda en el Sporting. Estoy dispuesto a vender mis acciones»
José María González de Caldas. Accionista del conjunto rojiblanco
JAVIER BARRIO «Me siento como un cero a la izquierda en el Sporting. Estoy dispuesto a vender mis acciones»
José María González de Caldas. Accionista del conjunto rojiblanco
Directo, claro y contundente. José María González de Caldas, uno de los máximos accionistas del Sporting junto a José Fernández (ambos forman parte de la sociedad 'Por el Futuro y Estabilidad del club'), no se mordió ayer la lengua para explicar el papel que ocupa en la entidad. El que fuera presidente del Sevilla lamentó, en una entrevista concedida a EL COMERCIO, que su presencia en el Sporting sea puramente testimonial y que no tenga contacto con las oficinas de Mareo.
-¿Cómo ha vivido la temporada del Sporting?
-Algo preocupado. Creo que hemos hecho un gran inicio, pero luego nos hemos deshinchado un poco y lo hemos pasado mal en el tramo final, aunque se ha conseguido mantener al equipo en Primera. Lo que yo lamento es que en un club que ha pasado tantas penurias en Segunda, que la pasada temporada nos tuvo en vilo casi hasta el final, no lo podamos construir entre todos con una mayor solidez.
-¿A qué se refiere?
-Cuando digo esto es porque no me considero para nada parte integrante del club. A mí se me ha requerido para comprar las acciones, pagar las fichas de los jugadores... Me llaman cuando las cosas están ardiendo, pero para nada más. Lo lamento porque soy un hombre de fútbol y creo que he hecho por el Sporting todo lo que he podido. Ya quisieran algunos, por ejemplo, que vinieran de otras regiones de España a ayudar a los equipos andaluces. Yo soy un andaluz que llegó a Asturias por el gran cariño que le tengo al Sporting desde pequeño y porque es un club que se hace querer. Creo que los buenos aficionados al fútbol somos de nuestro club y del Sporting.
-¿No tiene comunicación con el club?
-No. Veo, por ejemplo, que pueden vender a Canella y a Diego Castro, pero es algo de lo que me entero a través de los periódicos y creo, repito, que es una pena que después de haber mantenido al club dos años en Primera no unamos todos nuestros esfuerzos para hacer un equipo sólido y potente. Espero que no vuelvan a venir las desgracias para tener que recurrir a José María González de Caldas. Me da pena no saber qué política tiene el club, qué rumbo tiene financiera y deportivamente.
-¿Por qué decide hablar ahora de todo esto?
-He estado callado durante mucho tiempo y no he querido salir en ningún sitio. Pero te aguantas y te aguantas, hasta que al final ya me pregunto qué pinto aquí.
-¿No tiene contacto con Manuel Vega-Arango ni con José Fernández?
-Prácticamente ninguno. He intentado verle (a José Fernández), pero siempre está ocupado. Es una pena.
-A José Fernández, que es junto con usted el máximo accionista de la entidad rojiblanca, le une una amistad.
-Sí, pero el fútbol es un veneno para los futboleros. Cuando se está abajo hay que recurrir a todo el mundo, pero cuando se está arriba es un juguetito que nos gusta manejar a todos y no nos acordamos de la persona que nos ayudó. Es una pena. No digo que quiera intervenir en que se venda a uno o a otro jugador, ¡pero es que no me entero de nada! Y eso que cuando opino de alguien al final acierto. No voy a decir nombres, pero hace un tiempo me dije: ¿pero por qué fichamos a éste? Y al final salió petardo, aunque, lógicamente, yo hubiera deseado que fuera un monstruo.
-¿Habla de Maldonado, ex del Betis, al que conoce de Sevilla?
-No hablo de nadie. Sólo digo que tengo mucha información porque llevo toda mi vida en el fútbol y me llegó más información aún cuando me retiré. Pero llamo a Asturias y no me escuchan. Me siento mal porque me gusta estar en los sitios y opinar, no para que se haga lo que yo diga, pero para dar mi modesta opinión. Creo que lo he demostrado en este club porque lo único que he hecho es poner dinero. He ido a El Molinón el día del ascenso porque me lo pidieron y los jugadores lo merecían, pero no he aparecido en ningún lado, sólo quiero ayudar.
-¿Pero qué papel tiene dentro de la entidad?
-Mis amigos, que tengo muchos en esa bendita tierra que es Asturias, me han dicho: ¿qué pintas en el Sporting? Y yo les respondo: Un cero a la izquierda. Creo que puedo aportar ideas al club y ayudar a consolidar un proyecto de futuro. Dije en su día que venía a salvar la situación y a contribuir para hacer un club más sólido.
-¿En qué aspecto?
-Tenemos una magnífica cantera, ¿no? Pues habrá que apuntalarla con jugadores. Tenemos, además, un magnífico entrenador que ha conseguido llevar a este equipo a la élite y eso es un milagro porque el Sporting tiene uno de los presupuestos más bajos de España. Si hay un gran técnico, una magnífica cantera, una grandísima afición, porque da gusto ver esos viajes que realizan por toda España, ¿qué nos falta? Para mí un proyecto en el que nos unamos todos para tirar hacia adelante. Repito que mi intención no es la de aparecer ni representar al club en nada, pero al menos que se me escuche.
-En este mismo diario comentó en su día que había ofrecido al Sporting la posibilidad de incorporar algún jugador del Sevilla.
-He ofrecido y he dicho que ahí (en el Sevilla), podíamos. Pero parece que no sirve ninguno, ni tampoco de equipos con los que yo tenga relación. Servirán otros que al final... Tengo que decir todo esto esto porque me sale de dentro.
-¿Cómo empezó todo esto porque usted es junto con José Fernández el máximo accionista de la entidad?
-Sí, pero mire, se lo dije a Pepín (José Fernández) desde el primer momento: no quiero estar en ningún cargo de representación ni aparecer en ningún sitio porque tuve una etapa en el fútbol que ya concluyó. Pero me siento parte de este club y lo siento muy dentro de mí. Soy sevillista, como todo el mundo, sabe, pero le tengo un gran cariño a esa ciudad, esa afición y ese equipo, y eché una mano cuando se me requirió. Por lo menos que sepa la ciudad y la afición lo que siento porque algunos se preguntarán: ¿éste para que está aquí?
-¿Medita replantearse su situación accionarial?
-Lo que no tiene ningún sentido es la que tengo ahora. Creo que no se me está tratando bien, no se me está dando nada, cero, y no creo que sea justo. Aprovecho para que se enteren todos, que José María González de Caldas no tiene arte ni parte en el Sporting, salvo para deshacer entuertos y apagar fuegos. He estado ahí el primero cuando se me ha llamado y creo que he demostrado mi honradez, honestidad y deportividad. ¿Para qué me ha servido? Todo se ha olvidado.
-¿Medita vender sus acciones?
-Estoy dispuesto a todo. Lo que no estoy dispuesto es a seguir como estoy, en el más absoluto anonimato y desinformado totalmente. No me entero de nada, sólo de la que veo en los periódicos y escucho en las radios. Nada más.
-¿Cuando fue su último contacto con el Sporting?
-Hablé con Alfredo (García Amado) hace un tiempo por un tema de entradas, pagadas, claro.
-¿Y con José Fernández?
-Hace más de un año. Le he llamado en muchísimas ocasiones y siempre pasa algo. Me he brindado a desplazarme hasta donde fuera, pero no ha podido ser.
